«La primera función de cualquier sensor es proteger a su gente y sus operaciones. La segunda es reducir las alarmas molestas, que podrían causar perturbaciones a sus ocupantes y un costoso tiempo de inactividad para su negocio, además de crear peligros y confusión innecesarios. La tecnología patentada TrueAlarm de Simplex aborda las causas principales de las alarmas molestas: sensores sucios que resultan en dispositivos demasiado sensibles.
Compensación de deriva: los sensores evalúan los datos ambientales y compensan la contaminación para mantener la sensibilidad del detector y aumentar la inmunidad a las falsas alarmas. Indicación automática de limpieza del sensor: advierte a los operadores del sistema que un sensor está sucio antes de que se alcance su nivel de compensación de deriva, lo que podría provocar alarmas innecesarias. Siete niveles de sensibilidad aprobados por UL: cada sensor se puede configurar con la sensibilidad óptima para el entorno que protege, hasta el 0,2 %. Los niveles de sensibilidad se seleccionan entre uno de los rangos de sensibilidad más amplios de la industria, lo que proporciona diferencias notables en el tiempo de respuesta. Registro de valores máximos: proporciona un registro histórico de qué tan cerca ha estado cada sensor de su punto de alarma, lo que le permite configurar su sistema con mayor precisión para obtener la máxima sensibilidad sin activar alarmas molestas. Cumple con la séptima edición de UL 268: los sensores fotográficos y fototérmicos simplex son Cumple con la séptima edición de la norma UL 268 para detectores de humo para sistemas de alarma contra incendios. La norma, que entrará en vigor en junio de 2021, exige que los sensores, detectores y alarmas de humo pasen más de 215 pruebas de rendimiento nuevas o revisadas. Los sensores Simplex cumplen con este nuevo estándar, lo que garantiza que sus instalaciones tengan la protección más actualizada y cumplan con los requisitos más recientes».